Los campamentos de verano se han convertido, por muchas razones, en una de las opciones favoritas para toda la familia durante las vacaciones.
Por un lado, los adultos que no pueden compatibilizar su trabajo con las vacaciones escolares de sus hij@s encuentran en los campamentos de verano una garantía de que realizan actividad física y formativa, al mismo tiempo, que se entretienen. Y por otro, l@s niñ@s disfrutan y se lo pasan en grande haciendo nuevas amistades y descubriendo nuevas experiencias.
Otro punto a favor de los campamentos de verano es la oportunidad que ofrecen de estar en contacto directo con la naturaleza. Es un hecho que l@s más pequeñ@s pasan cada vez más horas delante de aparatos electrónicos, como tabletas, ordenadores, televisiones o smartphones, y aunque estos dispositivos suponen una pieza en su aprendizaje y entretenimiento, también es importante que conozcan y disfruten de su entorno.
Multiaventura en los árboles, tirolina, mini golf, karts, aprender inglés y programación son algunos ejemplos de las actividades que pueden realizar en la naturaleza mientras se divierten en Adventrix. Además, al separarse de los adultos, l@s niñ@s aprenden a desarrollar su autonomía y a ser más independientes.
Por último, los campamentos de verano sirven para que l@s más pequeñ@s conozcan de primera mano la importancia de cumplir los horarios y, por supuesto, las normas de convivencia. Un aprendizaje divertido durante las vacaciones que ayuda a conciliar toda la familia.
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